Libro Segundo de las Crónicas
1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 |
8 | 9 | 10 | 11 | 12 | 13 | 14 |
15 | 16 | 17 | 18 | 19 | 20 | 21 |
22 | 23 | 24 | 25 | 26 | 27 | 28 |
29 | 30 | 31 | 32 | 33 | 34 | 35 |
36 |
Capítulo 7: 2 Crónicas 7
Los sacrificios de la Dedicación del Templo
1 Rey. 8. 62-66
7 1 Cuando Salomón terminó de orar, bajó fuego del cielo y devoró el
holocausto y los sacrificios. La gloria del Señor llenó la Casa,
2 y
los sacerdotes no podían entrar en ella, porque la gloria del Señor
llenaba la Casa del Señor.
3 Todos los israelitas, al ver que bajaba el fuego y que la gloria
del Señor se posaba sobre la Casa, se postraron con el rostro en
tierra sobre el pavimento, mientras adoraban y celebraban al Señor,
"porque es bueno, porque es eterno su amor".
4 El rey y todo el pueblo ofrecieron sacrificios delante del Señor.
5 El rey Salomón ofreció en sacrificio 22.000 bueyes y 20.000
carneros. Fue así como el rey y todo el pueblo dedicaron la Casa de
Dios.
6 Los sacerdotes ocupaban sus puestos, y los levitas tocaban los
instrumentos musicales que había hecho el rey David para celebrar al
Señor, "porque es eterno su amor". Mientras el mismo David alababa a
Dios por medio de ellos, los sacerdotes tocaban las trompetas en el
lado opuesto y todo el pueblo permanecía de pie.
7 Salomón consagró el centro del atrio que está delante de la Casa
del Señor, ofreciendo allí los holocaustos y la grasa de los
sacrificios de comunión, porque el altar de bronce que él había
hecho no podía contener los holocaustos, la oblación y la grasa de
los sacrificios.
8 En aquella ocasión, Salomón, y con él todo Israel, celebró la
Fiesta durante siete días. Se congregó una asamblea inmensa, venida
desde la Entrada de Jamat hasta el Torrente de Egipto.
9 Al octavo día, tuvo lugar una asamblea solemne, porque habían
celebrado la dedicación del altar durante siete días y la Fiesta
durante otros siete días.
10 El día veintitrés del séptimo mes, Salomón despidió al pueblo y
ellos se fueron a sus campamentos, con el corazón desbordante de
alegría por el bien que el Señor había hecho a David, a Salomón y a
su pueblo Israel.
Nueva aparición del Señor a Salomón
1 Rey. 9. 1-9
11 Salomón terminó la Casa del Señor y la casa del rey, llevando así
a cabo todo lo que se había propuesto hacer para la Casa del Señor y
para su propia casa.
12 Entonces el Señor se apareció a Salomón durante la noche y le
dijo: "He oído tu oración y me he elegido este lugar como Templo
para los sacrificios.
13 Cuando yo cierre el cielo y no haya lluvia, cuando ordene a la
langosta que devore el país, cuando envíe a mi pueblo la peste,
14
si mi pueblo, el que es llamado con mi Nombre, se humilla y suplica,
si busca mi rostro y se convierte de sus malos caminos, yo escucharé
desde el cielo, perdonaré su pecado y haré que su país se
restablezca.
15 A partir de ahora, mis ojos estarán abiertos y mis oídos atentos
a la súplica que se haga en este lugar.
16 Y a partir de ahora, yo he elegido y consagrado esta Casa, a fin
de que mi Nombre resida en ella para siempre, mis ojos y mi corazón
estarán allí todos los días.
17 En cuanto a ti, si caminas en mi presencia como lo hizo tu padre
David, practicando todo lo que te mandado, observando mis preceptos
y mis leyes, 18 entonces yo mantendré tu trono real, como se lo
aseguré a tu padre David, cuando dije: ‘Nunca te faltará un
descendiente que gobierne Israel’.
19 Pero si defeccionan y abandonan los preceptos y mandamientos que
puse delante de ustedes, si van a servir a otros dioses y se postran
delante de ellos, 20 entonces los arrancaré de mi suelo, el que yo
les he dado, arrojaré lejos de mi presencia esta Casa que consagré a
mi Nombre, y la convertiré en objeto de burla y de irrisión entre
todos los pueblos.
21 Y esta Casa, que fue tan magnífica, será motivo de estupor para
todo el que pase junto a ella, a tal punto que se preguntará: ‘¿Por
qué el Señor ha tratado así a este país y a esta Casa?’.
22 Y se responderá: ‘Porque abandonaron al Señor, el Dios de sus
padres, que los había hecho salir de Egipto, y porque siguieron a
otros dioses, se postraron delante de ellos y los sirvieron: por eso
el Señor atrajo sobre ellos esta calamidad’".
Fuente: Catholic.net