| Deuteronomio 23 | 
| 1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 | 
| 8 | 9 | 10 | 11 | 12 | 13 | 14 | 
| 15 | 16 | 17 | 18 | 19 | 20 | 21 | 
| 22 | 23 | 24 | 25 | 26 | 27 | 28 | 
| 29 | 30 | 31 | 32 | 33 | 34 | 
					
					
					Personas excluidas de la comunidad de Israel
					
					1*No 
					entrará en la comunidad de Yahvé el hombre que tenga los 
					testículos majados o cuyo miembro genital haya sido cortado,
					2no entrará en la comunidad de Yahvé ningún 
					bastardo; ni siquiera en la décima generación entrará en 
					ella. 3No entrará en la comunidad de Yahvé 
					amonita ni moabita, ni siquiera en la décima generación 
					entrarán en ella; jamás entrarán; 4porque no 
					vinieron a vuestro encuentro con pan y agua en el camino 
					cuando salisteis de Egipto, sino que sobornaron contra ti a 
					Balaam, hijo de Beor, de Petor de Mesopotamia, para que te 
					maldijera. 5Pero Yahvé, tu Dios, no quiso 
					escuchar a Balaam; antes Yahvé tu Dios, te convirtió la 
					maldición en bendición; pues Yahvé, tu Dios, te ama. 6No 
					buscarás jamás su paz ni su bienestar en todos sus días.
					7*No 
					abominarás al idumeo, porque es tu hermano. No abominarás al 
					egipcio, porque fuiste peregrino en su tierra. 8Los 
					hijos nacidos de ellos en la tercera generación, podrán 
					entrar en la comunidad de Yahvé. 
					
					Limpieza del campamento
					
					9Cuando 
					salgas a campaña contra tus enemigos, guárdate de toda cosa 
					indecente, 10Si hubiere en medio de ti alguno que 
					se (haya) hecho 
					inmundo por algo que le sucedió de noche, salga fuera del 
					campamento y no vuelva al campamento, 11hasta que 
					al caer la tarde se haya lavado con agua, y a la puesta del 
					sol regresará al campamento. 12Además tendrás 
					fuera del campamento un lugar, adonde podrás salir. 13Tendrás 
					también en tu equipo una estaca, con la cual harás un hoyo 
					cuando te sentares fuera, y antes de volverte cubrirás tus 
					excrementos. 14Porque Yahvé, tu Dios, anda en 
					medio de tu campamento para protegerte y entregar tus 
					enemigos delante de ti; por eso tu campamento ha de ser 
					santo, para que Él no vea en ti cosas vergonzosas y no te 
					abandone. 
					
					Esclavos y prostitutos
					
					15No 
					entregarás a su amo, esclavo que se haya refugiado contigo, 
					huyendo de su amo. 16Habitará contigo, en medio 
					de ti, en cualquier lugar que eligiere, en algunas de tus 
					ciudades que le gustare; no le oprimirás. 17No 
					haya prostituta entre las hijas de Israel; tampoco haya 
					prostituto entre los hijos de Israel. 18*No 
					lleves a la Casa de Yahvé, tu Dios, las ganancias de la 
					ramera, ni el salario del perro, para cumplir un voto, pues 
					ambos son objeto de abominación ante Yahvé, tu Dios. 
					No 
					exijas interés por tu dinero
					
					19*No 
					exijas de tu hermano interés alguno por el dinero, ni 
					interés por comestibles, ni interés por ninguna otra cosa, 
					por las cuales se suele tomar interés. 20Del 
					extranjero podrás exigirlo, mas no lo exijas de tu hermano; 
					para que Yahvé, tu Dios, te bendiga en toda empresa de tu 
					mano en la tierra adónde vas para tomarla en posesión. 
					
					Acerca de los votos
					
					21*Cuando 
					hagas algún voto a Yahvé, tu Dios, no tardes en cumplirlo, 
					porque Yahvé, tu Dios, sin falta te lo reclamará y te 
					cargarías con un pecado. 22Si te abstienes de 
					hacer voto, no cometas pecado. 23Pero lo que una 
					vez salió de tus labios, lo cumplirás y ejecutarás, conforme 
					al voto libremente hecho a Yahvé, tu Dios, que prometiste 
					con tu boca. 
					La 
					propiedad ajena
					
					24Cuando 
					entrares en la viña de tu prójimo, podrás comer uvas según 
					tu apetito, hasta saciarte, mas no las pondrás en tu cesta.
					25*Cuando 
					entrares en la mies de tu prójimo, podrás arrancar espigas 
					con tu mano; mas no meterás la hoz en la mies de tu prójimo.  
					 
							
							
							
							
							* 
							1. La 
							comunidad de Yahvé: el pueblo de Israel. 3. Esta 
							ley se aplicaba solamente a los hombres. Cf. Rut. 4, 
							13; Nehemías 13, 1. Los
							amonitas y moabitas deben su origen al incesto de las hijas de Lot. 
							De ahí su exclusión perpetua. 
							
							
							
							
							* 
							7 s. Los idumeos eran descendientes de Esaú, hijo 
							del patriarca Isaac. 
							
							
							
							
							* 
							18. Los pueblos circunvecinos admitían la 
							prostitución cultual. En sus santuarios podían 
							instalarse rameras (hieródulas), que fornicaban con 
							los peregrinos y les cobraban por ello dinero. Había 
							también hieródulos, que aquí se llaman
							“perros”, 
							como en el Apocalipsis (Apocalipsis 22, 15) y tal 
							vez en Eclesiástico 13, 22. En otros lugares se les 
							da el nombre de afeminados (I Corintios 6, 9). Cf. 
							III Reyes 15, 12; 22, 47. Este rechazo que Dios hace 
							del dinero obtenido a costa del pecado, muestra cuán 
							abominables son para Él muchas de las llamadas 
							fiestas de caridad, donde se baila y se estimula el 
							vicio del juego y de la bebida so capa de amor a los 
							pobres. 
							
							
							
							
							* 
							19 s. Interés: 
							Algunos traducen
							usura. En 
							el Antiguo Testamento “interés” y “usura” significan 
							una misma cosa y estaban prohibidos ambos modos de 
							obtener ganancias mediante los préstamos. Solamente 
							al extranjero se le podía pedir intereses, pero no 
							al conciudadano. Esto habría sido una violación del 
							amor al prójimo, violación que hoy, 
							desgraciadamente, no se la considera como tal. Hay 
							quienes han interpretado mal este texto como si 
							Moisés permitiera la usura con los extranjeros. Lo 
							que autoriza Moisés es dar préstamos a interés a los 
							extranjeros, pero no préstamos usurarios. El 
							carácter social de esta ley descuella tinto más 
							cuanto que los otros pueblos permitían tomar 
							intereses. La Ley babilónica de Hammurabi p. ej. la 
							reconoce como institución legítima. Los Santos 
							Padres desaprueban formalmente el préstamo a 
							interés. Cf. 15, 3; Éxodo 22, 25; Jeremías 25, 36 s. 
							y notas. 
							
							
							
							
							* 
							21. Véase Números capítulo 30. 
							
							
							
							
							* 
							25. Arrancar 
							espigas: La Vulgata agrega
							y desgranarías. 
							Cf. Mateo 12, 1. 
 
 
							  | 
				
