1 Reyes 5 |
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22 |
Alianza entre Salomón e Hiram
1*Hiram,
rey de Tiro, envió a sus siervos a Salomón, cuando supo
que le habían ungido rey en lugar de su padre; pues
Hiram había sido siempre amigo de David. 2Salomón,
por su parte, envió a decir a Hiram: 3 “Bien
sabes que David mi padre no pudo edificar la Casa al
Nombre de Yahvé, su Dios, a causa de las guerras
(con los enemigos)
que le rodearon, hasta que Yahvé los puso bajo las
plantas de sus pies. 4Mas ahora Yahvé, mi
Dios, me ha dado reposo por todos lados; no hay más
enemigo ni obstáculo adverso. 5Por lo cual,
he aquí que yo me propongo edificar una Casa al Nombre
de Yahvé, mi Dios, como Yahvé lo ha ordenado a mi padre
David, diciendo: ‘Tu hijo que Yo pondré en tu lugar
sobre tu trono, ese edificará la Casa a mi Nombre.’
6*Manda,
pues, que se me corten cedros en el Líbano; y mis
siervos estarán con tus siervos, y te pagaré el salario
de tus siervos conforme a todo lo que pidieres; porque
bien sabes que no hay entre nosotros quien sepa cortar
las maderas como los sidonios.”
7*Cuando
Hiram oyó estas palabras de Salomón, se alegró mucho y
exclamó: “¡Bendito sea hoy Yahvé que ha dado a David un
hijo sabio sobre este pueblo tan grande!” 8Y
envió Hiram a decir a Salomón: “He tomado nota de lo que
me has mandado a decir. Cumpliré todos tus deseos en
cuanto a las maderas de cedro y las maderas de ciprés.
9Mis siervos las bajarán desde el Líbano al
mar, y yo las haré transportar en balsas por mar al
lugar que tú me indiques. Allí las haré desatar y tú te
las llevarás, y cumplirás, por tu parte, mi deseo,
suministrando víveres a mi casa.” 10Suministraba,
pues, Hiram a Salomón maderas de cedro y maderas de
ciprés, cuantas éste quería, 11en tanto que
Salomón daba a Hiram veinte mil coros de trigo para el
sustento de su casa y veinte coros de aceite de olivas
machacadas. Esto daba Salomón a Hiram todos los años.
12Y Yahvé dio a Salomón sabiduría, como se lo
había prometido. Hubo, pues, paz entre Hiram y Salomón,
e hicieron los dos alianza.
Número de los obreros
13Hizo el rey Salomón una leva
de obreros en todo Israel, la cual fue de treinta mil
hombres. 14*De ésos enviaba al Líbano
diez mil cada mes, por turno. Un mes estaban en el
Líbano, y dos meses en sus casas. Adoniram era prefecto
de los obreros de la leva. 15Tenía Salomón
además setenta mil hombres que llevaban cargas, y
ochenta mil canteros en la montaña, 16sin
contar los sobrestantes de Salomón, que estaban al
frente de la obra, en número de tres mil trescientos.
Éstos dirigían al pueblo que trabajaba en la obra.
17Por orden del rey se cortaban también piedras
grandes, piedras de gran precio, para hacer de piedras
talladas el cimiento de la Casa. 18*Los obreros de Salomón y los
obreros de Hiram y los giblios las tallaron y prepararon
las maderas y las piedras para edificar la Casa.
*
1. Tenemos en este capítulo un ejemplo de cómo
Salomón supo desarrollar el intercambio de
mercaderías con los países vecinos,
especialmente con los fenicios y su rey Hiram,
con el cual ya su padre David habla entablado
relaciones amistosas.
*
6. No faltaban bosques en Palestina, según vemos
en I Reyes 22, 5 s. y según nos dice el nombre
de Cariatyearim (ciudad de los bosques), pero no
proporcionaban maderas de construcción, por lo
cual los israelitas no tenían experiencia en esa
industria. El
Líbano, que recibió su nombre de las nieves que cubren sus altas
cumbres, es la cordillera que corre
paralelamente a la costa del Mediterráneo, como
frontera entre Fenicia y Siria. Su cumbre más
alta se eleva hasta más de 3.000 metros de
altura. En el Antilíbano la cumbre más alta es
el Hermón, que alcanza 2.759 metros de altura.
Los
sidonios: los habitantes de Sidón (hoy día
Saida), a 35 kilómetros al norte de Tiro, y en
sentido más amplio los habitantes de Fenicia.
*
7. Es de admirar esta expresión de alegría y de
piedad en un rey idólatra. Cf. 10, 9.
*
14. Con mucha caridad se establece que los
obreros queden libres algunos meses para
ocuparse de su hogar y de sus negocios. Aquí,
como en las leyes de Moisés, resplandece la
verdadera sabiduría de un gobierno.
*
18. Los
giblios: habitantes de la ciudad fenicia de
Gebal, situada al norte de Beirut. Los griegos
la llamaban Biblos, nombre que se trasladó al
papiro, cuyo mercado central era esta ciudad. De
ahí el nombre griego de “biblos” por libro, y el
nombre de “Biblia” por la Sagrada Escritura.
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