Iglesia Remanente

Eclesiástico 15

   

1 2 3 4 5 6 7
8 9 10 11 12 13 14
15 16 17 18 19 20 21
22 23 24 25 26 27 28
29 30 31 32 33 34 35
36 37 38 39 40 41 42
43 44 45 46 47 48 49
50 51

    

Bienes de la sabiduría

1*El que teme a Dios, hará buenas obras; y quien observa exactamente la justicia, poseerá la (sabiduría);

2*porque ella le saldrá al encuentro cual madre respetable, y cual virgen desposada le recibirá.

3*Le alimentará con pan de vida y de inteligencia; le dará a beber el agua saludable de la sabiduría, y fijará en él su morada, y él será constante.

4Será su sostén, y no se verá confundido, sino que será ensalzado entre sus hermanos.

5*En medio de la Iglesia le abrirá la boca, llenándole del espíritu de sabiduría y de inteligencia, y revistiéndole de un manto de gloria.

6Le colmará de consuelo y de alegría, y le dará en herencia un eterno renombre.

Sabiduría y alabanza de Dios

7Los hombres necios nunca la lograrán, mas los prudentes saldrán a su encuentro; no la verán los necios, porque está lejos de la soberbia y del dolo.

8Los hombres mentirosos no se acordarán de ella, mas los veraces estarán con ella, y andarán de bien en mejor hasta que vean a Dios.

9*No está bien la alabanza de ella en la boca del pecador;

10porque de Dios es la sabiduría, y con la sabiduría anda acompañada la alabanza de Dios; rebosará en los labios del hombre fiel, y el Señor se la infundirá.

11*No digas: “Por Dios ella me falta.” No hagas lo que Él aborrece.

12*Tampoco digas: “Él me ha inducido al error”, pues no necesita Él de los impíos.

13*Aborrece el Señor toda maldad, la cual no puede ser amada de aquellos que le temen.

El libre albedrío del hombre

14*Creó desde el principio al hombre, y le dejó en manos de su consejo.

15*Le dio, además, sus mandamientos y preceptos.

16Si guardando constantemente la fidelidad que le agrada, quisieres cumplir los mandamientos, ellos serán tu salvación.

17*Ha puesto delante de ti el agua y el fuego; extiende tu mano a lo que más te agrade.

18Delante del hombre están la vida y la muerte, el bien y el mal; lo que escogiere le será dado.

19Porque la sabiduría de Dios es grande, y su poder fuerte; y está mirando a todos sin cesar.

20*Tiene puestos el Señor sus ojos sobre los que le temen; Él observa todas las acciones de los hombres.

21A ninguno ha mandado obrar impíamente, y a ninguno ha dado permiso para pecar;

22*porque no le es grato a Él el tener muchos hijos desleales e inútiles.

 



* 1. La justicia, en el lenguaje bíblico es: a) la rectitud según la voluntad divina (Salmo 4, 6 y nota); b) la justificación que nos viene de Dios por Cristo (Romanos 3, 21 ss.; Filipenses 3, 9); c) la limosna p. ej. 7, 10; 12, 3. Los versículos 1-6 se emplean en la Epístola de la fiesta del Apóstol San Juan, cuyo Evangelio es el de la Sabiduría Encarnada.

* 2. Le saldrá al encuentro: Véase Sabiduría 6, 14-17.

* 3. Véase Juan 6, 27. Como el pan y el agua son lo más necesario para la vida del cuerpo, así el alma se alimenta con los dones de la sabiduría, la que le comunica la verdadera vida.

* 5. Es el Introito de la misa “In medio Ecclesiæ aperuit”, de los santos Doctores. No significa que ellos abrieron su boca sino que la sabiduría se la abrió. Véase 21, 20. Llenándole... de gloria. Falta en el texto griego. El manto de gloria simboliza la belleza espiritual de que Dios reviste a los justos. Véase Salmo 20, 6 y nota.

* 9 s. Hay una falsa religiosidad que alaba a Dios solamente con la boca, pero no cumple sus mandamientos. Cf. Isaías 29, 13; Jeremías 9, 8; 12, 2. ¡Qué repugnancia sentimos nosotros cuando nos alaban personas de cuya falta de sinceridad tenemos pruebas ciertas! ¡Cuánto menos le gustará al Altísimo la alabanza hipócrita!

* 11. Me falta (la sabiduría): Griego y hebreo: falto, es decir, peco. No hagas: Hebreo: No hace Él lo que detesta. Profunda explicación: Dios no puede hacer lo que Él mismo odia. Cf. Santiago 1. 13 s.

* 12. Impíos: Vaccari traduce con buen humor: Gente bribona.

* 13. No puede ser amada: Hebreo: No deja Él que suceda esto a los que le temen. El Padrenuestro nos confirma que es Dios quien nos libra de caer en la tentación. Véase Romanos 14, 4; 16, 25; Judas 24.

* 14. En manos de su consejo, lo cual supone que el hombre tiene la libertad de elegir entre el bien y el mal, entre la vida y la muerte (versículo 17 y 18). Adán escogió la muerte (Sabiduría 2, 24 y nota). Desde entonces la voluntad del hombre está debilitada y no es capaz de ninguna obra buena en el orden sobrenatural ni de cumplir los mandamientos sino mediante la gracia del Espíritu Santo que nos viene por el Redentor (Juan 1, 16 s.; 15, 5). “Haciendo lo que quería, dice San Agustín, llegaba adonde no quería llegar.”

* 15 s. Sobre los mandamientos, véase Salmo 24, 8 y nota. El versículo 15 falta en los originales.

* 17. Véase Deuteronomio 30, 15 y 19; Jeremías 21, 8. De ahí la necesidad de formar la voluntad y la inteligencia para que sepan elegir y seguir lo bueno. Los mismos paganos han comprendido ya la importancia del libre albedrío. “Nada hay, dice Séneca, tan difícil y arduo que no pueda ser vencido por el espíritu humano, y que no se haga familiar por una meditación sostenida” (De ira, II, 12). El filósofo pagano no conocía la gracia, que no nos deja nunca. “Dios, dice San Gregorio, nos da por medio de su gracia los buenos deseos; pero nosotros, con los esfuerzos de nuestro libre albedrío, nos valemos de los dones de la gracia para hacer reinar en nuestra alma las virtudes” (Moral.). La libertad depende de la gracia.

* 20. Véase Salmo 33, 16 y 19 y notas.

* 22. Falta en el original. Se ve que ha sido agregado como una bella meditación sobre el versículo siguiente (16, 1): Así como el hombre no ha de alegrarse en los muchos hijos si son malos, tampoco a Él le es grato eso.